Tras la reciente llegada del restyling del Ford Focus a los concesionarios, ahora llega el momento de que haga acto de presencia el Ford Focus ST, el modelo más potente de la gama por el momento. El compacto más deportivo de la marca del óvalo azul llega con dos carrocerías, la de cinco puertas y la familiar o Sportbreak y también dos sabores, gasolina o diésel.
El Focus ST más tradicional es el de gasolina y en esta nueva generación hace uso de un motor 2.0 EcoBoost de cuatro cilindros que rinde 250 caballos de potencia. Su 0-100 es de solo 6,5 segundos y lo más interesante es la baja media de consumo homologada, de 6,8 litros a los 100. Por primera vez en la historia del modelo hay un ST diésel, en este caso un 2.0 TDCi de 185 caballos, con el que se enfrentará a modelos como el Volkswagen Golf GTD o el Peugeot 308 GT. Es más lento en el 0-100 (8,1 segundos) pero también más eficiente con una media de 4,2 litros.
Estéticamente los ST se diferencian del resto de Focus por sus paragolpes delanteros y traseros deportivos, las taloneras y el spoiler que corona el portón del maletero. Las llantas de aleación son también específicas y la carrocería da mayor sensación de aplomo gracias a una suspensión rebajada.En el interior presenta unos asientos con mayor agarre lateral y tres relojes (temperatura de agua y presión de turbo y aceite) en lo alto del salpicadero como elementos más destacados.
A nivel de chasis las cotas de la suspensión y la dirección han sido revisadas. Se modifican muelles, amortiguadores y estabilizadoras y también se trabaja en las ayudas a la conducción del modelo, para que pueda entender una conducción deportiva sin ser tan intrusivo.
Desde la llegada al mercado del primer