Ford ha decidido realizar una serie de mejoras en el Kuga. Las mejoras se centran en la renovación de su familia de motores así como la incorporación de equipamiento, tanto en el apartado estético – nuevos colores disponibles – como en el tecnológico – nuevas funciones para su sistema SYNC de manos libres.
Con esta nueva gama de motorizaciones el modelo consigue mejorar las emisiones de CO2 tanto en los motores gasolina como diesel. Para lograrlo, ahora el Kuga cuenta de serie en todos sus modelos con los sistemas de Auto-Stop-Start o la Parrilla Activa; sistemas que ayudan a rebajar las emisiones y mejorar el consumo de combustible. Si quieres a conocerlo más a fondo, mi compañero Eduardo Lausin ha realizado recientemente la prueba del Ford Kuga Ecoboost 150 CV 4×2.
Ford hace especial hincapié en la incorporación del motor diesel 2.0 TDCI de 180 CV y 400 Nm. Se trata de una revisión del anterior 2.0 TDCI de 163 CV y 340 Nm, consiguiendo además emitir 19 g/km menos de CO2 y una mayor potencia de arrastre para el SUV compacto. Además con este motor; asociado siempre a la tracción total, se puede optar ahora por el cambio manual o automático, cuando antes con el motor de 163 CV tenías que escoger obligatoriamente el cambio automático de doble embrague Powershift.
Por otra parte, el motor 2.0 TDCI de 140 CV sube ahora hasta los 150 CV y aparece una nueva versión de acceso 2.0 TDCI de 120 CV. Ambas motorizaciones cuentan con unas emisiones de 122 g/km de CO2, mejorando en 17 g/km las del anterior motor. En gasolina, el motor 1.6 Ecoboost de 150 y 180 CV se ve sustituido por un nuevo bloque 1.5 Ecoboost, que se desdobla en las potencias de 150 y 182 CV. Las emisiones también se mejoran en 11 g/km y 8 g/km, respectivamente.
Cambiando de tercio, las mejoras que introduce