No te descubriremos nada nuevo al recordar el porqué de los nombres de los modelos de SEAT. Desde los años 80, y ya como filial del Grupo Volkswagen, SEAT adoptó el nombre de diferentes ciudades españolas para sus modelos, Ronda, Málaga, Marbella, etcétera. Y en ese preciso momento en el que SEAT abogaba por su internacionalización, la necesidad de un nombre apropiado para un nuevo utilitario llevó a los responsables de la marca a iniciar un proceso muy parecido al que seguirían unos padres para escoger el nombre de su hijo. Lejos de seguir la tradición familiar, de elegir el nombre de alguno de los padres, los abuelos o un personaje bíblico, a SEAT le bastaba tomar un mapa de España para escoger un nombre apropiado. Pero, ¿por qué Ibiza?
El auge de Ibiza como centro turístico del Mediterráneo animó a SEAT a escoger este nombre, en los albores de la internacionalización de la marca y la búsqueda de un público joven.
En los años ochenta Ibiza no era ni mucho menos el paraíso de la fiesta y la música electrónica que es hoy en día, la ciudad que en verano tiene como residentes a los mejores DJs internacionales. Pero desde los años 60 ya había comenzado el auge turístico de Ibiza, el movimiento hippie y sobre todo una gran fama internacional, por toda Europa, cuyo nombre evocaba a los mayores clichés del estilo de vida mediterráneo.
Las razones que menciona SEAT son tres. Primero, la imagen de Ibiza reflejaba los valores de una marca que buscaba una nueva identidad. Traduciéndolo a un lenguaje menos marketiniano, SEAT buscaba un público joven, que viera en Ibiza un nombre evocador. Segundo, Ibiza es sencillo de pronunciar y recordar en muchos idiomas. Tercero, Ibiza funciona bien en cualquier contexto cultural. Es decir, no resultaría un nombre