João Paulo de Oliveira se impone en una carrera de la Super Fórmula con lluvia sorpresa

João Paulo de Oliveira se impuso el pasado fin de semana en la cuarta prueba de la Super Fórmula en Motegi, una carrera que de nuevo tuvo a la lluvia como protagonista de las últimas vueltas. Pero si en Fuji esta se pudo reanudar, esta vez fue imposible y el brasileño se redimió tras el error que le dejó sin una victoria segura en la anterior cita. En la sesión clasificatoria quedó claro que los coches con motor Honda habían mejorado con respecto a carreras anteriores, aunque estando aún por debajo de Toyota. En el momento de la salida, la diferencia de rendimiento podía quedar clara y de hecho los Toyota empezaron la carrera con más energía que los coches con motor Honda. João Paulo de Oliveira partió particularmente bien y se escapó desde el primer momento, buscando la victoria que se le escapó en Fuji en la última ronda del campeonato, el mes pasado. El drama de Honda se veía aumentado por el drive through de Naoki Yamamoto, que se situó incorrectamente en la parrilla de salida. La carrera tuvo poca historia durante la mayor parte en cabeza, con Oliveira mandando sobre los rivales sin oposición alguna. No fue hasta la parte final, a menos de quince vueltas del final, que empezó a llover. El líquido elemento podía cambiarlo todo si llegaba a cuajar. La tormenta esperada se hizo esperar pero al final llegó a falta de once vueltas para el final. La cantidad de agua en el circuito de Motegi era espectacular, con todos los pilotos navegando con los neumáticos lisos a baja velocidad hasta llegar al pit-lane para montar las gomas de agua. A partir de entonces, sería cuestión de supervivencia e intentos de ser más rápidos que los rivales sin sufrir una salida de pista

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